1 Crónicas 23

Los ayudantes de los sacerdotes

1 Cuando David ya era un anciano, eligió a su hijo Salomón para que fuera rey de Israel.

2-32 David le había dicho al pueblo: «El Dios de Israel le ha dado tranquilidad a su pueblo y ha decidido vivir para siempre en Jerusalén. Los ayudantes de lossacerdotesya no necesitan transportar la carpa de Dios ni los utensilios que se usan en el culto».

Por eso, David reunió a todos los jefes de Israel, a los sacerdotes y a sus ayudantes, y les dio a conocer sus últimas decisiones con respecto a estos ayudantes. Ellos quedarían bajo las órdenes de los sacerdotes, que erandescendientesde Aarón, y los ayudarían en el trabajo del templo.

David también decidió contar a todos los ayudantes mayores de treinta años, para organizarlos y repartirles los trabajos del templo. En total se contaron treinta y ocho mil ayudantes, y su trabajo fue distribuido de la siguiente manera: Veinticuatro mil para dirigir el trabajo en el templo; seis mil serían asistentes y jueces; cuatro mil vigilarían las entradas del templo, y cuatro mil serían cantores y músicos encargados de la alabanza a Dios con instrumentos musicales que David había hecho. Todos estos ayudantes eran descendientes de Leví.

Luego, David hizo una lista de los descendientes de Leví que eran mayores de veinte años y jefes de sus grupos familiares, y los dividió en tres, según los hijos que tuvo Leví: Guersón, Quehat y Merarí.

Los guersonitas

Guersón tuvo dos hijos:

Ladán,

Simí.

Ladán tuvo tres hijos, y fueron jefes de sus grupos familiares:

Jehiel,

Zetam,

Joel.

Simí tuvo siete hijos:

Selomit,

Haziel,

Harán,

Jáhat,

Ziza,

Jeús,

Beriá.

Como los dos menores, Jeús y Beriá, no tuvieron muchos hijos, fueron contados y registrados como si fueran una familia.

Los quehatitas

Quehat tuvo cuatro hijos:

Amram,

Ishar,

Hebrón,

Uziel.

Amram tuvo dos hijos:

Aarón,

Moisés.

Aarón y susdescendientesfueron elegidos por Dios para que siempre presentaran ante él lasofrendasmássagradas, quemaran elincienso, y sirvieran ybendijeranal pueblo en el nombre de Dios.

Moisés y sus descendientes fueron contados como parte de latribude Leví. Moisés tuvo dos hijos:

Guersón,

Eliézer.

El hijo mayor de Guersón fue Sebuel.

Eliézer solo tuvo un hijo llamado Rehabías, quien tuvo muchos hijos.

El hijo mayor de Ishar fue Selomit.

Hebrón tuvo cuatro hijos; sus nombres, del mayor al menor, fueron:

Jerías,

Amarías,

Jahaziel,

Jecamán.

Uziel tuvo dos hijos; sus nombres del mayor al menor, fueron:

Micaías,

Isías.

Los meraritas

Merarí tuvo dos hijos:

Mahli,

Musí.

Mahli tuvo dos hijos:

Eleazar,

Quis.

Eleazar nunca tuvo hijos varones, y las hijas que tuvo se casaron con sus primos, los hijos de Quis.

Musí tuvo tres hijos:

Mahli,

Éder,

Jeremot.

Nuevo trabajo de los ayudantes

Así fue como quedaron inscritos todos estos ayudantes, quienes quedaron a las órdenes de lossacerdotespara ayudarlos en el templo de Dios. De acuerdo al turno y la tarea que les había tocado, los distintos grupos de ayudantes cumplían con estos trabajos:

Cuidar y limpiar los patios del templo, los cuartos y todos los utensilios sagrados.

Ayudar en cualquiera de los cultos que se hacían en el templo.

Tener listo todo lo que se usaba en las ofrendas: el pansanto, la harina, las hojuelas de pan sinlevadura, las ofrendas cocidas, la masa y los instrumentos que se usaban para pesar y medir.

Estar presentes en el templo, por la mañana y por la tarde, para dar gracias y alabar a Dios.

Ayudar a los sacerdotes siempre que se presentaban las ofrendas quemadas en honor de Dios, es decir, lossábados, los días de luna nueva y los de fiesta.

1 Crónicas 24

El trabajo de los sacerdotes

1 Aarón tuvo cuatro hijos:

Nadab,

Abihú,

Eleazar,

Itamar.

Aarón y susdescendientesfueron los encargados de todos los trabajos sacerdotales.

2 Pero como Nadab y Abihú murieron antes que su padre, y no tuvieron hijos, Eleazar e Itamar se hicieron cargo del trabajo sacerdotal.

3-6 Después de hacer un sorteo, David, Sadoc y Ahimélec les asignaron turnos a lossacerdotespara que prestaran sus servicios. Lo hicieron así porque tanto entre los descendientes de Eleazar como entre los de Itamar había sacerdotes muy importantes dedicados al servicio del templo.

Uno de los ayudantes de los sacerdotes, llamado Semaías hijo de Natanael, fue el encargado de anotar todos los nombres en una lista oficial; el rey, los jefes, los sacerdotes Sadoc y Ahimélec, y los jefes de los grupos sacerdotales y de los grupos de ayudantes, fueron testigos de cómo se escribió esta lista.

Como había más sacerdotes descendientes de Eleazar que de Itamar, se asignaron más turnos a los jefes de Eleazar. A los de Itamar se les asignaron ocho turnos, y a los de Eleazar, dieciséis.

7-18 Según el sorteo que se hizo, este es el orden:

Joiarib,

Jedaías,

Harim,

Seorim,

Malquías,

Mijamín,

Cos,

Abías,

Jesús,

Secanías,

Eliasib,

Jaquim,

Hupá,

Jesebab,

Bilgá,

Imer,

Hezir,

Pisés,

Petahías,

Hezequiel,

Jaquín,

Gamul,

Delaías,

Maazías.

19 De acuerdo a este orden, estos sacerdotes se fueron turnando para servir en el templo, tal como lo había ordenado el Dios de Israel por medio de Aarón.

Otra lista de ayudantes

20-31 Hubo otros ayudantes que también fueron asignados por sorteo para servir en el templo. Y tanto lossacerdotescomo estos ayudantes fueron tratados de igual manera. También en este caso el rey David, Sadoc, Ahimélec y los jefes de los grupos familiares de los sacerdotes y de losdescendientesde Leví, fueron testigos de cómo se hizo el sorteo.

Esta es la lista de sus nombres y del grupo al que pertenecían:

Subael, descendiente de Amram;

Jehedías, descendiente de Subael;

Isías, descendiente de Rehabías. Isías era el principal de ellos.

Selomot, descendiente de Ishar;

Jáhat, descendiente de Selomot;

Jerías,

Amarías,

Jahaziel,

Jecamán; los cuatro anteriores eran descendientes de Hebrón;

Micaías, descendiente de Uziel;

Samir, descendiente de Micaías;

Isías, hermano de Micaías;

Zacarías, descendiente de Isías;

Mahli,

Musí, descendientes de Merarí;

Sóham,

Zacur,

Ibrí, descendientes de Jaazías, hijo de Merarí;

Eleazar, descendiente de Mahli, hijo de Merarí. Eleazar no tuvo hijos.

Jerahmeel, descendiente de Quis, hijo de Merarí;

Mahli,

Éder,

Jerimot, descendientes de Musí.

1 Crónicas 25

Los músicos del templo

1-6 David y los jefes encargados del templo apartaron a Asaf, a Hemán y a Jedutún, junto con todos sus hijos, para que se encargaran de la música de los cultos. Estos músicos comunicaban mensajes de Dios por medio de sus cantos o acompañados por instrumentos musicales, y estaban bajo las órdenes directas del rey David. Asaf, Hemán y Jedutún dirigían a sus hijos cuando alababan a Dios en el templo, acompañados de arpas, platillos y otros instrumentos de cuerdas. Esta es la lista de sus nombres:

Los hijos de Asaf:

Jacur,

José,

Netanías,

Asarela.

Los hijos de Jedutún:

Guedalías,

Serí,

Isaías,

Simí,

Hasabías,

Matatías.

Los hijos de Hemán:

Buquías,

Matanías,

Uziel,

Sebuel,

Jeremot,

Hananías,

Hananí,

Eliatá,

Guidalti,

Romamti-ézer,

Josbecasa,

Malotí,

Hotir,

Mahaziot.

Estos catorce hombres, junto con sus tres hermanas, formaban la familia de Hemán, y por eso llegó a ser muy poderoso, pues así se lo había prometido Dios.

7 Los que estaban entrenados para cantar a Dios fueron en total doscientos ochenta y ocho.

8 Estos se turnaron, por medio de un sorteo, para prestar su servicio, sin importar que fueran adultos o jóvenes, maestros o estudiantes.

9-31 Se organizaron en grupos de doce; cada grupo estaba compuesto por el jefe de familia, sus hijos y hermanos. Cada grupo tenía el nombre del jefe de familia; este es el orden en que les tocó servir:

José,

Guedalías,

Zacur,

Isrí,

Netanías,

Buquías,

Jesarela,

Isaías,

Matanías,

Simí,

Azarel,

Hasabías,

Subael,

Matatías,

Jeremot,

Hananías,

Josbecasa,

Hananí,

Malotí,

Eliatá,

Hotir,

Guidalti,

Mahaziot,

Romamti-ézer.

1 Crónicas 26

Organización de los vigilantes

1-19 Los encargados de vigilar las entradas del templo de Dios también hicieron un sorteo para repartir los turnos de vigilancia. Así, los turnos se asignaron sin importar de qué familia era el vigilante, pues todos fueron tratados de la misma manera en que fueron tratados los ayudantes de lossacerdotes. Quedaron repartidos de acuerdo al siguiente orden:

Del grupo familiar de Coré:

Meselemías, hijo de Coré y nieto de Asaf, y sus siete hijos:

Zacarías,

Jediael,

Zebadías,

Jatniel,

Elam,

Johanán,

Eliehoenai.

Obed-edom y sus ocho hijos:

Semaías,

Jozabad,

Joah,

Sacar,

Natanael,

Amiel,

Isacar,

Peultai.

Semaías y sus seis hijos:

Otní,

Rafael,

Obed,

Elzabad,

Elihú,

Samaquías.

Estos seis fueron los jefes de sus grupos familiares. Obed-edom tuvo entonces sesenta y dosdescendientes, pues Dios lobendijodándole muchos hijos. Los hijos y hermanos de Meselemías que sirvieron como vigilantes fueron dieciocho en total. Todos estos fueron hombres famosos por la valentía que mostraban como vigilantes del templo.

Del grupo familiar de Merarí:

Hosá y sus hijos:

Simrí,

Hilquías,

Tebalías,

Zacarías.

Los hijos y hermanos de Hosá fueron en total trece. Hosá nombró a Simrí como el jefe, aunque este no era su hijo mayor.

Cada día los que vigilaban las entradas se repartían de la siguiente manera:

Seis hombres en la entrada del este, entre los que estaba Selemías.

Cuatro hombres en la entrada del norte, entre los que estaba un consejerosabiollamado Zacarías hijo de Selemías.

Cuatro hombres en la entrada del sur, para vigilar las dos bodegas que allí había. Dos hombres para cada bodega; entre ellos estaban Obed-edom y sus hijos.

Cuatro hombres en la entrada del oeste. Esta entrada estaba junto a la gran cuesta que lleva al patio oeste, y se le llamaba Saléquet. Entre estos vigilantes estaban Supím y Hosá.

Dos hombres para vigilar el patio oeste.

Los tesoreros

20-28 Otros hombres de latribude Leví cuidaban los tesoros del templo y lasofrendasespeciales que elprofetaSamuel, el rey Saúl, el oficial Abner y el oficial Joab habían dado para Dios. Entre esas ofrendas también estaba parte del botín de guerra que el rey David, los jefes de las tribus, y todos los jefes del ejército habían entregado para los gastos del templo de Dios.

Entre estos vigilantes habíadescendientesde Guersón hijo de Moisés, y descendientes de Amram, Zetam y Joel. Unos eran hijos de Jehiel y nietos de Ladán; otros eran hijos de Ishar, Hebrón y Uziel, descendientes de Amram. Otros eran descendientes de Eliézer, el hermano de Guersón, entre los cuales estaban Rehabías, Isaías, Joram, Zicrí y Selomit.

Como jefe de todos estos tesoreros nombraron a Sebuel, descendiente de Guersón.

Otros trabajos fuera del templo

29 Quenanías y sus hijos fueron loslíderesy jueces encargados de los asuntos del gobierno, y no trabajaban en el templo. Ellos erandescendientesde Ishar.

30 Hasabías, que era descendiente de Hebrón, tenía un total de mil setecientos parientes. Todos eran hombres muy valientes, que estaban encargados de todos los asuntos religiosos y políticos de los israelitas que vivían al oeste del Jordán.

31-32 Cuando David tenía ya cuarenta años gobernando, ordenó que se revisaran las listas de los descendientes de Hebrón. El rey se dio cuenta de que entre esos descendientes había en Jazer de Galaad hombres muy valientes. El jefe de todos esos hombres era Jerías, y en total sumaban dos mil setecientos jefes de familia. Entonces el rey David los puso a cargo de todos los asuntos religiosos y políticos de lastribusde Rubén, Gad y la media tribu de Manasés.

1 Crónicas 27

Organización del ejército

1 El ejército de Israel estaba formado por doce grupos, que se turnaban para servir al rey una vez al año. Cada grupo estaba formado por veinticuatro mil hombres, entre los que había jefes de grupos familiares y oficiales del ejército.

2-15 Esta es la lista de los jefes de los grupos militares que cada mes prestaban sus servicios al rey:

Primer mes: Jasobeam hijo de Zabdiel,descendientede Fares.

Segundo mes: Dodai el ahohíta, y su ayudante Miclot.

Tercer mes: Benaías hijo del jefe de lossacerdotesJoiadá, y jefe de los treinta valientes; pero en realidad, su hijo Amizabad era el jefe del grupo.

Cuarto mes: Asael hermano de Joab; luego ocupó su lugar su hijo Zebadías.

Quinto mes: Samhut el izraíta.

Sexto mes: Irá hijo de Iqués, el tecoíta.

Séptimo mes: Heles el pelonita, descendiente de Efraín.

Octavo mes: Sibecai el de Husá, descendiente de los zarjítas.

Noveno mes: Ebiézer el de Anatot, descendiente de Benjamín.

Décimo mes: Maharai el de Netofá, descendiente de los zarjítas.

Decimoprimer mes: Benaías el de Piratón, descendiente de Efraín.

Duodécimo mes: Heldai el de Netofá, descendiente de Otoniel.

Organización de las tribus de Israel

16-22 Esta es la lista de los jefes de lastribusde Israel:

Eliézer hijo de Zicrí, de la tribu de Rubén.

Sefatías hijo de Maacá, de la tribu de Simeón.

Hasabías hijo de Quemuel, de la tribu de Leví.

Elihú, hermano de David, de la tribu de Judá.

Omrí hijo de Micael, de la tribu de Isacar.

Ismaías hijo de Abdías, de la tribu de Zabulón.

Jerimot hijo de Azriel, de la tribu de Neftalí.

Oseas hijo de Azazías, de la tribu de Efraín.

Joel hijo de Pedaías, de la media tribu de Manasés.

Idó hijo de Zacarías, de la otra media tribu de Manasés, en Galaad.

Jaasiel hijo de Abner, de la tribu de Benjamín.

Azarel hijo de Jeroham, de la tribu de Dan.

Además, Sadoc fue el jefe de losdescendientesde Aarón.

23 Como Dios había prometido que los israelitas se multiplicarían tanto que nadie los podría contar, David no hizo una lista de los que eran menores de veinte años.

24 Y aunque Joab había comenzado a contarlos, no pudo terminar, porque Dios envió una enfermedad sobre los israelitas como castigo. Por esta razón, en el libro que narra los hechos más importantes del reinado de David nunca se anotó cuántos eran.

Administradores del rey David

25-31 Esta es la lista de los que estaban encargados de cuidar y administrar las propiedades del rey David:

Azmávet hijo de Adiel: Era el principal tesorero.

Jonatán hijo de Ozías: Cuidaba los tesoros que estaban guardados en diferentes lugares del territorio de Israel.

Ezrí hijo de Quelub: Era el jefe de los campesinos que cultivaban las tierras del rey.

Simí de Ramat: Administraba y cuidaba los viñedos.

Zabdí de Sefam: Era el encargado de llevar el vino a las bodegas.

Baal-hanán de Guederá: Administraba los olivares y los árboles de higos silvestres que había en la llanura.

Joás: Cuidaba los depósitos de aceite.

Sitrai de Sarón: Atendía el ganado que pastaba en Sarón.

Safat hijo de Adlai: Cuidaba el ganado que pastaba en los valles.

Obil el ismaelita: Vigilaba los camellos.

Jehedías de Meronot: Era el encargado de cuidar las burras.

Jaziz el agareno: Era el encargado de cuidar las ovejas.

Otros ayudantes de David

32-34 Estos son los hombres que ayudaban a David en otros trabajos:

Jonatán el tío de David: Era secretario, y unsabioconsejero.

Jehiel hijo de Hacmoní: Cuidaba siempre de los hijos del rey.

Ahitófel: Era consejero del rey; luego ocuparon su lugar Joiadá hijo de Benaías, y Abiatar.

Husai el arquita: Consejero y amigo del rey.

Joab: Era el jefe del ejército.

1 Crónicas 28

Últimas instrucciones de David

1 David reunió en Jerusalén a todos los jefes y autoridades de Israel. Cuando todos estaban reunidos,

2 David se puso de pie y les dijo:

«Compatriotas ylíderesde mi pueblo, escúchenme con atención: Yo quería construirle un lugar permanente alcofre del pacto, para que allí nuestro Dios reinara; y ya estaba preparado para hacerlo.

3-4 »Nuestro Dios decidió que de latribude Judá saldría un rey que gobernaría por siempre en Israel. Por eso eligió a mi familia, y de entre todos mis hermanos me eligió a mí. A pesar de esto, Dios no me permitió construirle el templo, porque yo había participado en muchas guerras y había matado a mucha gente.

5 »Sin embargo, de entre todos los hijos que Dios me ha dado, él eligió a Salomón como rey para que gobierne en su nombre sobre Israel.

6 Además, Dios me prometió que Salomón construirá el templo y sus salones, y que lo tratará como a un hijo.

7 Y si Salomón se esfuerza y obedece todos susmandamientoscomo lo hace ahora, Dios hará que su reino sea firme y permanezca para siempre.

8 »Dios y todo Israel son testigos de lo que estamos haciendo. Por eso, en este día, delante de ellos, les pido a ustedes, los líderes del pueblo, que respeten y obedezcan todos losmandamientosde Dios; solo así seguirán viviendo en esta tierra fértil, y podrán dejársela a sus hijos para siempre».

Luego el rey David se volvió a su hijo Salomón y le dijo:

9 «Salomón, hijo mío, Dios conoce todos tus pensamientos, y sabe cuáles son tus intenciones en todo momento. Por eso, obedécelo con amor y de buena gana. Él siempre responderá tus peticiones; pero si no lo obedeces, él te rechazará para siempre.

10 »No olvides que Dios te eligió para construir su templo. Por eso, ¡sé fuerte y ponte a trabajar!»

11-19 Entonces David le entregó a su hijo Salomón los planos que había hecho para la construcción del templo. Los planos seguían las instrucciones de Dios para construir todos los edificios, salones, cuartos y patios del templo. En los cuartos de alrededor se guardarían los utensilios, tesoros yofrendasespeciales, y también dormirían lossacerdotesy los ayudantes que vendrían por turnos a trabajar en el templo.

David también le entregó a Salomón el oro y la plata necesarios para hacer todos los utensilios y muebles que se usarían para los cultos en el templo; le indicó el peso que debían tener, y el material que debían usar para fabricarlos. Esta es la lista de algunos de los muebles y utensilios: los candelabros y sus lámparas; las mesas donde se pondría el panconsagrado; los tenedores, los tazones, las jarras y las copas; el altar delinciensoy el carro que serviría para mover losquerubinesque, con sus alas extendidas, cubrirían el cofre del pacto de Dios.

20-21 Además, David le indicó a Salomón quiénes quedarían bajo sus órdenes y lo ayudarían a construir el templo: los sacerdotes y sus ayudantes, que por turnos prestarían sus servicios en el templo de Dios; los obreros expertos en trabajos manuales; los jefes y todo el pueblo en general.

Luego, David le dijo a Salomón:

«¡Sé fuerte y valiente! ¡Cumple con tu trabajo y construye el templo de Dios! ¡No tengas miedo ni te desanimes, porque Dios siempre estará contigo! Él no te dará la espalda ni te abandonará».

1 Crónicas 29

David habla a todo el pueblo de Israel

1 Luego, el rey David le dijo a toda la gente que se había reunido:

«Dios eligió a mi hijo Salomón para que le construya el templo; sin embargo, él todavía está muy joven y no tiene experiencia para hacer un trabajo tan importante. ¡Él construirá el templo para nuestro Dios, y no se trata de la construcción de un palacio ordinario!

2 »Con muchossacrificioshe podido juntar los materiales necesarios para construir el templo de mi Dios: oro, plata, bronce, hierro y madera para los muebles y utensilios que deben ser confeccionados. También he reunido muchísimas piedras preciosas de toda clase.

3 »Es tan grande mi amor por este templo para mi Dios, que además de todo lo que ya he reunido, voy a entregar de mis propias riquezas lo siguiente:

4 cien mil kilos del oro más fino que existe, y doscientos treinta mil kilos de plata fina, para recubrir las paredes del templo y sus edificios,

5 y para los muebles y utensilios que harán los artesanos.

»¿Quién de ustedes quiere demostrar hoy su amor a Dios, dando unaofrendapara la construcción del templo?»

Ofrendas del pueblo

6 Entonces todos los jefes de Israel y las altas autoridades del reino dieron de buena voluntad las siguientesofrendas:

7 Ciento sesenta y cinco mil kilos y diez mil monedas de oro,

trescientos treinta mil kilos de plata,

cerca de seiscientos mil kilos de bronce,

tres millones trescientos mil kilos de hierro.

8 Además, los que tenían piedras preciosas se las entregaron a Jehiel,descendientede Guersón, que era el encargado de la tesorería del templo.

9 El rey David y todo el pueblo estaban muy contentos porque todos dieron con sinceridad.

Oración de David

10 Y aprovechando que tenía al pueblo reunido, Davidbendijoa Dios con estas palabras:

«¡Bendito seas, Dios de Israel;

Dios de nuestroantepasadoJacob;

bendito seas para siempre!

11 »¡Dios mío, a ti te pertenecen

la grandeza y el poder,

lagloria, el dominio y la majestad!

Porque todo lo que existe es tuyo.

¡Tú reinas sobre todo el mundo!

12 »Tú das las riquezas y el honor,

y tú dominas a todas tus criaturas.

Tuyos son el poder y la fuerza,

y das grandeza y poder a todos.

13 »Por eso es que hoy, Dios nuestro,

te damos gracias,

y alabamos tu nombre glorioso.

14-16 »Dios nuestro, todas estas riquezas que hemos dado para construirte un templo, en realidad te pertenecen a ti. Son tuyas; tú nos diste todo, y ahora solo te regresamos lo que de ti habíamos recibido. Además, delante de ti, mi pueblo y yo somos como gente sin patria, que va de un lado a otro, como antes lo hicieron nuestros antepasados. Nuestra vida es como una sombra sobre la tierra, sin esperanza alguna.

»Sabemos que ninguno de nosotros merece reconocimiento por lasofrendasque hemos traído.

17 Yo sé, Dios mío, que tú te das cuenta de nuestras intenciones y que te gusta que seamos sinceros. Por eso me da una gran alegría saber que tu pueblo y yo te hemos presentado nuestras ofrendas, de buena voluntad y con toda sinceridad.

18 »Dios de nuestros antepasados Abraham, Isaac y Jacob: haz que tu pueblo tenga siempre esta manera de pensar y de sentir, y que te ame con todo el corazón.

19 Y te pido que le des a mi hijo Salomón el profundo deseo de obedecer y poner en práctica todos tusmandamientos; también te pido que le permitas construir el templo con estos materiales que he reunido».

20 Cuando terminó, David le dijo al pueblo: «¡Bendigany alaben a Dios!» Entonces todo el pueblo, inclinándose ante Dios y ante el rey, bendijo y alabó al Dios de sus antepasados.

Israel reconoce a Salomón como su rey

21 Al día siguiente le presentaron a Dios, en nombre de todo Israel, muchísimos animales parasacrificarlosy quemarlos en su honor: mil toros, mil carneros y mil corderos, con susofrendasde vino.

22 Ese día derramaron aceite sobre la cabeza de Salomón, para nombrarlo sucesor del rey David; lo mismo hicieron con Sadoc, para nombrarlosacerdote. Esa fue la segunda ocasión en que todo el pueblo reconoció a Salomón como su rey, y todos comieron y bebieron con mucha alegría delante de Dios.

23-24 Así pues, Salomón reinó en lugar de David, su padre. Todos los jefes del pueblo, los soldados más valientes, y todos los hijos del rey David, fueron leales y apoyaron al rey Salomón. Todo el pueblo de Israel le obedeció, y así, su reino fue firme y exitoso.

25 Dios hizo que Salomón fuera grande, poderoso y famoso ante su pueblo, como no lo fue ningún otro rey de Israel.

Muerte de David

26 David hijo de Jesé reinó sobre todo Israel

27 durante cuarenta años, siete de los cuales vivió en Hebrón, y los treinta y tres restantes, en Jerusalén.

28 David murió tranquilamente cuando ya era muy anciano, lleno de riquezas y honores. En su lugar reinó su hijo Salomón.

29-30 Los hechos más importantes de la historia del rey David, desde el principio hasta el fin, están escritos en los libros de losprofetasSamuel, Natán y Gad. En ellos se narran no solo los hechos más importantes con respecto al poder y valentía de David, sino también lo que le pasó a Israel y a sus países vecinos.

2 Crónicas 1

Salomón le pide sabiduría a Dios

1 Salomón, el hijo de David, se convirtió en un rey muy poderoso, gracias a la ayuda de Dios.

2-6 En aquellos días, el santuario en donde el pueblo se reunía paraadorara Dios estaba en Gabaón. Ese santuario había sido construido en el desierto por Moisés, el servidor de Dios. En ese santuario estaba el altar de bronce que hizo Besalel, hijo de Urí y nieto de Hur. Elcofre del pactode Dios no estaba allí porque David se lo había llevado desde Quiriat-jearim hasta Jerusalén; allí lo había puesto en una carpa que él mismo había preparado.

Un día, Salomón mandó llamar a todos los jefes del ejército, a los jefes del gobierno y a todos los jefes de las familias y de lastribus. Cuando todos llegaron, se fue con ellos al santuario de Gabaón a adorar a Dios. Allí Salomón le presentó a Dios milofrendasquemadas sobre el altar de bronce.

7 Esa noche, Dios se le apareció a Salomón y le dijo:

—Pídeme lo que quieras, y yo te lo daré.

8-10 Salomón le respondió:

—Mi Dios, tú fuiste muy bueno con mi padre David, y a mí me has puesto a reinar en su lugar. Ser rey de un pueblo tan numeroso que no se puede contar, es muy difícil. Por eso, ahora te ruego que cumplas lo que le prometiste a mi padre. ¡Damesabiduríae inteligencia para que pueda gobernar a un pueblo tan grande como el tuyo! Porque sin tu ayuda, nadie es capaz de hacerlo.

11 Entonces Dios le respondió a Salomón:

—Lo normal hubiera sido que me pidieras mucho dinero, poder y fama; o que te permitiera vivir por muchos años y destruyera a todos tus enemigos. Sin embargo, has pedido sabiduría e inteligencia para reinar sobre mi pueblo.

12 »Por eso, te concedo tu deseo, y además te haré el rey más rico, poderoso y famoso que haya existido. Nadie podrá igualarte jamás.

13 Después de esto, Salomón salió del santuario y partió de Gabaón hacia Jerusalén, donde reinó sobre todo Israel.

Las riquezas de Salomón

14 Salomón reunió mil cuatrocientos carros y doce mil jinetes. Algunos estaban en los cuarteles de carros de guerra, y otros formaban su guardia personal en Jerusalén.

15 Era tan rico que en Jerusalén había plata y oro por todas partes, y abundaban los árboles de madera fina, como los árboles comunes en la llanura.

16-17 Los comerciantes de la corte compraban en Egipto y Cilicia los caballos para Salomón. El precio de un carro comprado en Egipto era de seiscientas monedas de plata, y el de un caballo, ciento cincuenta. El rey Salomón acumuló en Jerusalén grandes cantidades de plata, y sembró tantos árboles de cedro que llegaron a ser tan comunes como las flores del campo. ¡Hasta los reyes hititas y sirios compraban sus carros y caballos a los comerciantes de la corte de Salomón!

2 Crónicas 2

Salomón le pide ayuda al rey Hiram

1 1 (1.18)Salomón se propuso construir un templo para Dios, y también un palacio para él mismo.

2-18 2-18 (1-17)Por ello le envió este mensaje a Hiram, rey de Tiro:

«Yo sé que tú le enviaste madera de cedro a David, mi padre, para que construyera su palacio. Ahora te pido que me ayudes. Voy a construirle un templo a mi Dios, para que el pueblo le lleve allí todas lasofrendasque él nos pide para cada día, y para cadasábado, y durante las fiestas de laluna nuevay para las otras fiestas que él nos ha pedido celebrar.

»Como nuestro Dios es más poderoso que todos los dioses, deseo construirle un templo que sea grandioso. Claro que no es posible hacer un templo para que él viva allí. ¡Hasta el cielo, que es enorme, resulta pequeño para él! Sin embargo, aunque sé que no lo merezco, le construiré un templo para quemarinciensoen su honor.

»Por eso te pido que me envíes a alguien que sepa hacer finos trabajos en oro, plata, bronce y hierro, y también en telas de color púrpura, rojo y morado. Que además sepa hacer grabados y pueda trabajar con los expertos que servían a mi padre David, y que ahora están a mi servicio en Judá y en Jerusalén.

»Como tus servidores son expertos para cortar madera del Líbano, mándame de allí maderas finas. Y puesto que el templo que construiré será grande y maravilloso, y necesitaré muchísima madera, enviaré a mis servidores para que les ayuden a los tuyos.

»Yo, por mi parte, te daré nueve mil toneladas de trigo, y también de cebada; y cuatrocientos cuarenta mil litros de vino, y la misma cantidad de aceite, para alimentar a los leñadores que corten la madera».

Entonces Hiram rey de Tiro, le envió a Salomón una carta con este mensaje:

«Dios ama a su pueblo, y por eso le ha concedido que tú seas su rey. ¡Benditosea el Dios de Israel, creador de todo lo que existe, porque le dio al rey David un hijosabio, lleno de prudencia e inteligencia, el cual construirá un templo para Dios y un palacio real!

»Tal como me lo has pedido, te envío a un hombre que, por cierto, es hijo de una mujer de latribude Dan y de un fenicio de la ciudad de Tiro. Se llama Hiram-abí; es muy sabio e inteligente, y trabaja de manera excelente en todo lo que requieres hacer. Él trabajará junto con los mejores artesanos que servían a tu padre David, y con los que ahora te sirven.

»Nosotros somos tus servidores. Envíanos el trigo, la cebada, el aceite y el vino que has prometido, y mientras eso nos llega, cortaremos en el Líbano todas las maderas finas que necesites. Luego las transportaremos por mar, en forma de balsas, hasta Jope. De allí, tú te encargarás de que sean llevadas a Jerusalén».

Aunque David ya había contado a todos los extranjeros que vivían en Israel, Salomón hizo otro censo de ellos, y contaron un total de ciento cincuenta y tres mil seiscientos. Entre ellos distribuyó el trabajo de esta manera: Tres mil seiscientos eran capataces que supervisaban el trabajo; ochenta mil hombres cortaban piedras de la montaña, y setenta mil las cargaban.

2 Crónicas 3

Salomón construye el templo

1-2 El día dos del mes de Ziv, cuando ya tenía cuatro años de reinar, Salomón dio la orden para que empezaran a construir el templo de Dios en Jerusalén. Lo construyeron en el lugar que David había elegido, es decir, en el terreno de Ornán el jebuseo, que está en el monte Moria, porque allí Dios se le había aparecido a David.

3 Estas son las medidas del templo de Dios, según lo diseñó Salomón:

Los cimientos medían veintisiete metros de largo por nueve de ancho.

4 El pórtico de la entrada medía lo mismo que el ancho del templo: nueve metros de largo y nueve de alto. Salomón recubrió de oro fino el interior del pórtico.

5-7 Las vigas, las entradas, las paredes y las puertas de la parte interior del edificio principal estaban cubiertas con tablas de pino que, a su vez, estaban recubiertas de oro finísimo. Sobre el oro grabaron palmeras y cadenas, y colocaron adornos con piedras preciosas. Sobre las paredes estaban grabadas figuras dequerubines.

8-14 ElLugar Santísimomedía lo mismo que el ancho del templo: nueve metros de largo y nueve de ancho. Para recubrirlo usaron cerca de veinte mil kilos de oro fino. Cada clavo era de oro y pesaba un poco más de medio kilo. Dentro del Lugar Santísimo pusieron dos querubines totalmente recubiertos de oro. Los querubines estaban de pie; sus caras miraban hacia la entrada, y sus alas extendidas medían en total nueve metros, que era todo el ancho del Lugar Santísimo. Cada querubín tocaba con un ala una pared del lugar, y con la otra, tocaba la punta del ala del otro querubín.

La cortina que separaba el Lugar Santísimo estaba hecha de lino fino tejido con lana morada, azul y roja; sobre ella bordaron figuras de querubines.

Los cuartos de la parte superior del templo también estaban recubiertos de oro.

Las dos columnas

15-17 Salomón mandó hacer dos columnas de casi dieciséis metros de altura, y las colocó a la derecha y a la izquierda de la entrada del templo. Sobre cada columna puso un adorno de dos metros veinticinco centímetros de alto. Cada adorno estaba decorado con figuras en forma de cadena, de las cuales colgaban cien figuras con forma de manzana. A la columna de la derecha Salomón la llamó Jaquín, y a la de la izquierda Bóaz.